La artista, que ha tenido plena libertad para desarrollar su propuesta, ha creado la imagen de dos figuras en plena actuación. El lenguaje geométrico y el cromatismo característicos de Ruth Juan quedan totalmente reflejados en la obra.
El uso de una paleta de color que se aleja de los tópicos y la elección de un contrabajo como instrumento representativo, resume muy bien el espíritu de los Viernes Flamencos. Un festival abierto a nuevos proyectos y a artistas que, sin perder el respeto por la tradición flamenca, se insertan en la contemporaneidad.
Ruth Juan nació en Barcelona y allí creció y desarrolló su visión de la vida. Creó con dos amigas un taller de diseño y confección de vestuario para espectáculos de circo y teatro y más adelante trabajó en un taller donde pudo trabajar en proyectos con mayor renombre.
Desde 2009 reside en Bilbao, donde apostó por lo que siempre había sentido como su verdadera pasión: la ilustración. Tras estudiar y estar becada un año por la Fundación BilbaoArte, materializó su trabajo en su primer libro ilustrado. Trabaja en distintos proyectos como ilustradora freelance bajo el nombre de su marca Junita Makina.
Crea ilustraciones para libros, trabajos de imagen gráfica y murales, como el situado en la Plaza Pormetxeta de Barakaldo, dedicado a Altos Hornos de Vizcaya o el del Convento de la Concepción, en Bilbao.
(FUENTE: Barakaldoko Udala)
Compartir: